miércoles, 24 de agosto de 2011

O NEGATIVO



Haciendo un análisis de mi vida me doy cuenta de mi forma de actuar…

Siempre estoy disponible para todo aquel que NECESITE, no importa que, siempre estoy y gracias a Dios mi apoyo/ayuda siempre es bien recibida...

Me gusta darme, entregar todo por el todo, saber que el otro SABE que YO ESTOY para el, que SIEMPRE puede contar conmigo… También me alegra ver que no soy de esas ayudas o compañías que hastían, sino que Dios me ha dado una humilde sabiduría de entender cuándo es necesario, cuándo es suficiente y cuándo no hace falta mi compañía…


Pero aplicando esto a mi persona, cuando soy yo que NECESITA, todo es al revés… No me gusta!!! Es irónico, repelo la ayuda, el apoyo, las atenciones, es como si detestara el que se preocupen, el que me atiendan, es como sentirme que estoy cargando a los demás y simplemente no los quiero cerca hasta que logre salir de mi problema. En este repeler la compañía, me llegan momentos donde quiero refugiarme en los hombros de algún amigo, pero de repente si las cosas no se dan fortuitamente entonces yo me alejo entendiendo que estoy invadiendo, que no debo molestar, que debo controlar la situación y salir sola de mi problemática.

No hay forma de que piense diferente, siempre quiero resolver primero yo, luego yo y después quizá tal vez si la condición es exageradamente muy fuerte entonces alguien mas, pero nunca me gusta “cargar” al otro con lo mío.

Estos días que he estado viviendo una tormenta tropical con amenaza de huracán interior, muchas personas se han sentido identificados conmigo y han querido darme un apoyo full, y la forma en que me he sentido ofuscada por este bombardeo de afecto y preocupación colectiva es insólita! Eso y mas ha provocado este escrito.

Me puse a pensar, a raíz de un fragmento de la película Todopoderoso 2 que compartió un hermano/amigo conmigo, en lo afortunada y mal agradecida que estoy siendo. Porque cuántas personas desearían contar con tanto afecto, apoyo y cariño sincero… He pensado y analizado sin poder comprender por qué este efecto “repelente al amor”, porque no existe esa razón especial que me haga desistir de este no querer cargar al otro con mis cosas, este no querer que me pregunten, que estén al tanto, que me busquen, que se envuelvan en mi situación…


Hoy, viendo mi carnet del grupo sanguíneo que corresponde al grupo O RH negativo, y verificando nueva vez que yo puedo donar sangre a todos los grupos sanguíneos, mas no puedo recibir sangre de otro que no sea mi mismo grupo, paradójicamente visualicé mi situación existencial con esto. Quizá puedo ayudar a todos, me gusta y les hace bien, pero no puedo recibir ayuda de todos si no de aquellos que mi ser entienda que son compatibles y pertenecen al mismo sentimiento… Que detalle mas interesante! =)


Ojalá las personas fueran lo suficientemente maduras como para comprender esto y no sentirse aludidas o rechazadas por mi actitud… Mientras, me mantendré “refugiada” en aquellos que considero “compatibles” a mi, esperando que Dios me dé la suficiente comprensión para sobrellevar aquellos que insisten en hacerme una “transfusión de cariño” que no puedo evitar repeler… Que dificil...!

Ligia Elena C. O.
Santo Domingo, 24 agosto 2011

No hay comentarios: